Tu intestino influye en tu salud, ¡y en tu estado de ánimo!

La microbiota intestinal cumple un rol clave en nuestra estabilidad emocional. Insomnio, cansancio extremo y malhumor, todo esto puede estar conectado con la salud de tu intestino. Te contamos todo, porque ¡informarse es salud! 

El intestino y el cerebro se comunican en forma bidireccional. ¿Te asombra? Pues, también se asombraron los investigadores que han estudiado científicamente los mecanismos de la interacción entre el cerebro y el intestino. Porque descubrieron que nuestra salud intestinal es un factor clave para descifrar el origen de muchas afecciones orgánicas y padecimientos psíquicos, y que interviene en forma decisiva en nuestro bienestar general.
Entonces, es hora de preguntarnos: ¿de qué depende la buena salud del intestino? Pues, en gran medida, del estado de equilibrio de la microbiota intestinal. Aquí vamos a desmenuzar el asunto. 

¿Qué es la microbiota intestinal?

Hasta el 2014, se la conocía como flora intestinal. Ahora se la denomina microbiota intestinal, y es el conjunto de microrganismos o bacterias alojadas en el intestino. Pero, ¿qué función cumple tu microbiota intestinal, y por qué es tan importante? 

Estas colonias de bacterias cumplen un rol clave para la digestión, que es el de intervenir en la descomposición de ciertos alimentos, para que se puedan absorber ciertos nutrientes. Pero esa no es la única función: la microbiota también previene infecciones y protege el sistema inmunológico, estimulando una constante producción de defensas. 

En las últimas décadas, aumentaron mucho las enfermedades producidas por una respuesta anormal del sistema inmunitario. Los científicos creen que esto puede vincularse con las alteraciones de nuestra microbiota intestinal. Por eso es objeto permanente de estudio, ya que hay numerosos indicios de que en el intestino se puede hallar la explicación de enfermedades de origen desconocido como las autoinmunes, la fibromialgia, el Alzheimer, o la obesidad crónica. 

Así funciona tu microbiota intestinal: 

  • Mejora tu digestión

La fermentación es un proceso clave de la digestión, y lo lleva a cabo la enorme comunidad de microorganismos que conforman tu microbiota.

  • Te defiende

Cuando ingresan al organismo bacterias nocivas, la microbiota forma una barrera natural defensiva, e impide que los patógenos colonicen el intestino.

  • Produce vitaminas B y K

Estas vitaminas no podrían ser sintetizadas sin la intervención de la comunidad de microrganismos que se alojan en tu intestino. 

Frutas y verduras nutren la microbiota 

Disbiosis: el equilibrio perdido

Una microbiota intestinal sana es aquella que contiene una composición bacterial variada, conviviendo en un sano equilibrio simbiótico. Cuando se altera este equilibrio delicado se produce la disbiosis, que es como se denomina el estado de desequilibrio funcional y cualitativo de la microbiota. 

Recientemente, los científicos lograron identificar dos tipos de bacterias intestinales que juegan un rol clave en procesos de depresión, y que inciden en otras enfermedades mentales. Este enorme descubrimiento, en el futuro, permitirá diseñar nuevos y revolucionarios tratamientos. 

Pero más allá de ciertas condiciones que no podemos controlar, debemos saber que todos los alimentos, las bebidas, los medicamentos, el conjunto de nutrientes que ingerimos, todos ellos modifican constantemente la microbiota intestinal.
Pero también hay otros factores que pueden alterar la armonía intestinal: 

  • El estrés.
  • El exceso y mal uso de antibióticos.
  • Los hábitos sedentarios.
  • La mala higiene del sueño (dormir menos horas de las necesarias).
  • Las dietas agresivas que restringen por completo grupos de nutrientes. 

¿Cuáles son las señales que te indican que puedes estar padeciendo disbiosis? 

Cuando notas que tienes el vientre inflamado sin motivo; cuando sufres estreñimiento o diarreas, cuando son frecuentes las infecciones del tracto digestivo o del sistema respiratorio; también el cansancio injustificado, las migrañas y la debilidad corporal; ante la aparición de cualquiera de estas señales debemos obligarnos a revisar cómo nos estamos alimentando. 

Pero no sólo hay señales físicas: el desequilibrio intestinal también puede generar malhumor, depresión, cansancio e irritabilidad

4 curiosidades sobre la microbiota intestinal: 

  • Convive con los humanos desde el nacimiento. 
  • Está formada por unas 10 billones de bacterias
  • Cada adulto alberga entre 800 y mil especies distintas de bacterias.
    La combinación de especies de cada persona es única e irrepetible, como las huellas digitales. 
  • Estos microorganismos que viven en el tracto gastrointestinal suman alrededor de 1.8 kilos.

Los buenos hábitos crean equilibrio

Como hemos visto, la salud intestinal depende, en gran medida, de nuestra alimentación.
Por eso, debes tener en cuenta qué hábitos nutren positivamente la microbiota, y cuáles la desequilibran:

  • Aprende a relajarte y respirar profundamente.
  • Sigue una dieta bien variada, que incluya frutas y verduras de estación, de todos los colores, crudas y cocidas.
  • Sigue tu rutina de ejercicios.
  • Camina, al menos, 20 minutos diarios.
  • No tomes alcohol a diario.
  • No te automediques.
  • Suma alimentos probióticos y prebióticos a tu dieta

 

Para tener en cuenta: 

Si necesitas aprender más sobre como mejorar tu salud estaremos encantados de ayudarte en nuestro centro de Manuel Becerra de Madrid. Fisioterapia y entrenamiento personal en Madrid.

Bibliografía

  1. Proyecto: Microbioma Humano. Centro de Investigación y divulgación interdisciplinaria. https://hmpdacc.org/hmp/overview/ 
  2. Dysbiosis in disease in human and animal models. Estudio de autores múltiples. Publicado por el National Institutes of Healt. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4838534/